jueves, 11 de abril de 2013

Reig Pla: Que un día podamos decir que todas las leyes contra la vida han sido abolidas igual que lo fue la esclavitud

Las cartas de Benedicto XVI y el Papa Francisco al obispo Juan Antonio Reig Pla (Religión Confidencial)





El Santo Padre el Papa Francisco y Su Santidad el Papa emérito Benedicto XVI han enviado a Mons. Juan Antonio Reig Pla sendas cartas, a través de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, en respuesta a los telegramas que el Obispo Complutense les envió el pasado 13 de marzo

El Santo Padre el Papa Francisco y Su Santidad el Papa emérito Benedicto XVI agradecen en sus misivas, recibidas en el día de ayer, la muestra de cercanía a sus personas por parte de Mons. Reig y de la Diócesis de Alcalá de Henares, y ambos imparten su Bendición al señor Obispo y a la Comunidad Diocesana.

Telegrama al Papa Francisco

Muy querido Santo Padre Francisco:

La Diócesis de Alcalá de Henares, que presido en la caridad, y yo mismo damos gracias a Dios por su elección como nuevo Romano Pontífice. Desde ahora le encomendamos a la Sagrada Familia de Nazaret y le aseguramos nuestras constantes oraciones, nuestro amor, nuestra plena comunión y nuestra total obediencia como Sucesor de Pedro y Vicario de Cristo en la tierra. Imploramos de Vuestra Santidad su bendición apostólica para esta Diócesis Complutense, sus sacerdotes, diáconos, religiosos y religiosas, fieles cristianos laicos y para este humilde pastor. Con todo afecto en Cristo. Firmado: Juan Antonio Reig Pla, Obispo de Alcalá de Henares (España).

Telegrama al Papa Emérito Benedicto XVI

Muy querido Papa Emérito Benedicto XVI:

Tras la elección del nuevo Romano Pontífice el Santo Padre Francisco, por el que damos tantas gracias al Altísimo, la Diócesis de Alcalá de Henares y yo mismo queremos hacerle saber que también agradecemos a Dios el don que ha significado su persona, ministerio y magisterio para todos nosotros en estos ocho años de pontificado y también en el periodo en el que presidió la Congregación para la Doctrina de la Fe. Rezamos por su persona y su familia, encomendándoles a todos a la Sagrada Familia de Nazaret, y le suplicamos que se acuerde en sus oraciones de esta Diócesis Complutense, sus sacerdotes, diáconos, religiosos y religiosas, fieles cristianos laicos y por este humilde pastor. Gracias por todo Santidad. Con todo afecto en Cristo. Firmado: Juan Antonio Reig Pla, Obispo de Alcalá de Henares (España).

miércoles, 10 de abril de 2013

Reig Pla y tres respuestas de la Iglesia para promover la cultura de la vida: Raquel, Ángel y Effetha (Zenit)




El obispo de Alcalá de Henares y presidente de la Subcomisión Episcopal de Familia y Vida de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Reig Pla, ha presentado esta mañana el Encuentro Internacional por la Vida que se celebrará este fin de semana en la Universidad madrileña CEU San Pablo con el lema "La Iglesia católica por la vida. Ofreciendo respuestas concretas". El encuentro, que se sitúa dentro de la Semana por la Vida que organiza la Provincia Eclesiástica de Madrid (Madrid, Alcalá de Henares y Getafe) con la colaboración de Human Life International y la asociación Spei Mater, recogerá las aportaciones de los profesionales que ya están trabajando a favor de la vida en España y de las distintas experiencias diocesanas a través de talleres y mesas redondas.

En una entrevista exclusiva con ZENIT el obispo Reig Pla ha explicado cuáles son esas respuestas concretas que la Iglesia católica promueve a favor de la vida. Nos ha contado que dentro de la Jornada por la Vida que indicó el papa Juan Pablo II y que en España se ha estado celebrando tradicionalmente, se ha pensado extender a una Semana por la Vida. En esta Semana han introducido el Encuentro Internacional en el que se quieren compartir las experiencias de la Iglesia en Estados Unidos y tratar los temas sobre la amenaza contra la vida, tanto naciente como terminal, y generar entre todos la cultura por la vida.

Son tres proyectos concretos los que se quieren difundir para construir la "cultura de la vida". El proyecto Raquel, acoge a mujeres que han realizado un aborto o han sufrido el síndrome del posaborto. Este proyecto, ha explicado el obispo, ya se está realizando en 14 diócesis de España. Con esto no se quiere ofrecer sólo una respuesta de carácter psicológico, sino abarcar la integridad de la persona y su entorno familiar.

El segundo proyecto que se conocerá como Ángel, realizará un acompañamiento a mujeres que se encuentran desorientadas durante el embarazo y se las ayudará para que no aborten. Esta iniciativa ya ha comenzado en la diócesis de Alcalá gracias a voluntarios que se acercan a estas mujeres y les ofrecen ayuda.

El tercer proyecto llevará el nombre de Effetha (ábrete) cuyo objetivo es fomentar los movimientos provida en la pastoral de las parroquias, promoviendo la formación en las distintas áreas de trabajo y orando por la vida.

Reig Pla, homilías y los medios de comunicación (El País)




Sobre las palabras vertidas aquel 7 de abril, el prelado ha asegurado que "hablaba de niños que, llevados por una ideología, pueden dudar de su condición e identidad sexual y que a veces puede llevar a que uno pruebe si es de una manera o de otra". El religioso ha añadido que "probando", los chicos pueden "llegar incluso a prostituirse", porque "la prostitución existe"  y los niños "llegan a ser utilizados por otros". Reig ha reiterado que los locales de prostitución existen. "No hay más que salir a la noche madrileña", ha dicho.

No obstante, ha querido puntualizar que, con lo que dijo entonces, su intención era "ponerlo a la misericordia de Dios, nunca para denunciar" a nadie y que nunca se refirió a homosexuales. "Sí hablé de niños, de empresarios, de personas que, para ganar estado en su empleo, también entran en relaciones sexuales con sus jefes", ha subrayado. "Querer empecinarse en que yo dije lo que no dije y negar la realidad de los hechos conocidos personalmente, entiendo que es un empecinamiento o es una batalla política para desautorizar la voz de un obispo".

Reig Pla: "Queremos generar una cultura de la vida, para que la persona sea respetada en su dignidad"



(Archimadrid.org) Juan Antonio Reig Pla ha invitando a “promover juntos la cultura de la vida”. Durante la presentación del 'Encuentro Internacional por la Vida', el obispo de Alcalá de Henares ha asegurado que la batalla por la cultura de la via es larga. "Tan larga posiblemente como la que pretendía abolir la esclavitud, porque estamos viviendo un momento de crisis de civilización en el que se ha oscurecido el carácter sagrado e inviolable de la vida humana”, aseguró Reig Pla. "Necesitamos voces proféticas, almas y corazones libres para entrar en algo que verdaderamente redunda en el bien de todos y cada uno de nosotros".

Fragmentos de la intervención del obispo Reig Pla:

“Cuando los católicos promovemos la cultura de la vida, lo hacemos siempre con los argumentos que recibimos tanto de la luz de la razón como de la fe”, que son “buenos para promover el bien de la dignidad de la vida humana”.

“La Iglesia católica nunca se permite entrar en el juicio de personas. Cuando se trata de enjuiciar a las personas, nosotros seguimos las palabras de Jesús: `no juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados”.

“Nos preocupa tanto la miseria como la violencia, el terrorismo, la guerra, la prostitución, el embrutecimiento con la droga, las mafias, el tratar a los niños como turismo sexual, el que se puedan promover verdaderamente destrozos del medio ambiente, y lo que pueda suponer la desigualdad de la pobreza en el mundo. Cuando miramos la vida, la miramos en esa totalidad”.

“Queremos generar una cultura de la vida para que la persona sea respetada en su dignidad, y los matrimonios y los padres y las madres puedan custodiar desde el amor a sus hijos, los enfermos sean custodiados, los niños no sean maltratados, las mujeres no sean maltratadas, desaparezca la lacra del terrorismo en España… y desde ahí generar, entre todos, una cultura por la vida: toda la vida, y la totalidad de la vida de todas las personas”.



"¿Por qué no hay un cambio legal ya?" Reig Pla sobre el aborto y el Estado de Derecho


(LARAZÓN) 08 de abril de 2013.
Juan Antonio Reig Pla / Obispo de Alcalá de Henares.

Si lo miramos desde el punto de vista de la moral católica el «aborto procurado» de manera, consciente y libre es un pecado que, como la sangre de Abel, clama al cielo. Por eso la Iglesia católica une al pecado del aborto la pena de la excomunión. Si lo miramos desde una perspectiva simplemente humana, el aborto socava los fundamentos del Estado de Derecho. ¿Qué Estado de derecho es ése que afirma el «derecho» a destruir la vida de los inocentes en el seno de sus madres? Los que defienden la práctica del aborto se han quedado, gracias a la biología, la genética y la ciencia médica, sin argumentos. La vida humana comienza desde el momento mismo de la fecundación. Así lo reza el lema de la campaña por la vida: «Humano desde el principio». Esta verdad es así de manera incontestable. Por eso los partidarios del «aborto» no se atreven a utilizar esta palabra. Con el maquillaje del lenguaje, utilizan otras expresiones: «Interrupción del embarazo», «salud reproductiva» o «derecho a decidir».

Si no existen argumentos a favor, ¿por qué se promueven y mantienen las leyes del aborto en el mundo? Por dos razones: por la presión de organismos internacionales que, en una sociedad global, condicionan sus ayudas a la reducción de la población (mediante la anticoncepción, la esterilización, la práctica de la «salud reproductiva», etc.); y por el manejo de un concepto perverso de libertad: la libertad insolidaria anclada en el individualismo y la libertad que prescinde de la verdad y se afirma como voluntad de poder. Por eso el Papa Juan Pablo II decía que ésta era una guerra de los poderosos contra los débiles (EV 12). Ante este panorama, la mejor opción es ayudar a las madres y proteger la vida concebida. Mantener un día más la ley injusta del aborto en España clama al cielo.

sábado, 16 de febrero de 2013

Reig Pla: "Gracias por devolvernos a Dios y por anunciar por tres veces en España la belleza de la vocación familiar"


GRACIAS BENEDICTO XVI
 
(Publicado en La Gaceta) Nadie debe entrar a juzgar, Santo Padre, su decisión al presentar la renuncia al ministerio de Obispo de Roma, Sucesor de San Pedro, pues sin duda se trata de un asunto entre Dios y su conciencia. Es verdad que buena parte del Pueblo de Dios hubiéramos gozado viéndole como Papa hasta el final de su vida. Estoy seguro de que en estos últimos meses por su mente y corazón han pasado muchas de las expresiones paulinas: “Todo lo puedo en Aquel que me conforta” (Flp 4, 13), “Sé de quién me he fiado” (2Tm 1, 12), “Cuando soy débil, entonces es cuando soy fuerte” (2 Co 12, 10). Sobre todas ellas descuellan las palabras del Evangelio: “Para Dios no hay nada imposible” (Lc 1, 37). Sin embargo, por el bien de la Iglesia, su conciencia, examinada con rectitud, con certeza, ante el Altísimo, le ha llevado a la renuncia. ¡Bendito sea Dios!

Presentada la renuncia tal y como establecen los cánones, ahora es el momento de la gratitud y de la oración. Gratitud por la obra inmensa llevada a cabo como colaborador del Papa Beato Juan Pablo II en la Congregación para la Doctrina de la Fe. Su vasta cultura filosófico-teológica y su profunda fidelidad han ido arrojando luz y sabiduría sobre todas las cuestiones que han seguido a la celebración del Concilio Vaticano II: la teología de la liberación, la unicidad y universalidad salvífica de Jesucristo y de la Iglesia, las cuestiones derivadas de la cultura de la muerte, la proposición de los temas innegociables para orientar la misión pública de los católicos, la adecuada hermenéutica para la lectura de la Palabra de Dios y para la fiel interpretación de los textos del Concilio Vaticano II, los criterios adecuados para el sano ecumenismo y para la práctica del diálogo interreligioso, etc. El relato podría extenderse enormemente porque son muchas las cuestiones afrontadas en su etapa como Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Al margen de estas cuestiones, no quiero olvidarme del carácter profético de las conversaciones con Vittorio Messori contenidas en el libro Informe sobre la fe (1985), su contribución en la redacción del Catecismo de la Iglesia Católica y su trabajo al servicio de los obispos y de la nitidez de la fe católica. Del mismo modo hemos de subrayar su capacidad de diálogo con representantes de la cultura como Jürgen Habermas o de la política como Marcello Pera.

El día en que fue elegido como sucesor de Pedro para mí es inolvidable. Fue el 19 de abril de 2005. Es el mismo día en que se celebra la Virgen del Milagro, patrona de mi pueblo. Se trata de un icono que, según consta en las actas notariales, lloró en 1520 veintisiete lágrimas mientras celebraba la Santa Misa un humilde sacerdote. Ese mismo año Lutero negaba en su obra De captivitate babylonica Ecclesiae el valor sacrificial de la Eucaristía. Recuerdo con qué ilusión le regalé, junto con mis paisanos, una réplica de este cuadro y le indiqué que mi pueblo (Cocentaina) ponía todo su Pontificado bajo la protección de la Santísima Virgen del Milagro, la cual con su llanto se unía al sacrificio de su Hijo en la cruz. En ningún momento he dudado de que, junto a la oración del pueblo fiel por el sucesor de Pedro, no le ha faltado la asistencia de la Virgen que ha hecho de su ministerio una bendición para la Iglesia.

Gracias Santo Padre por acompañarnos con su paternidad, por habernos confirmado en la fe y por haber arrojado tanta luz y sabiduría sobre un mundo, particularmente occidente, donde se está produciendo el eclipse de Dios. Más allá de las cuestiones morales y de la dictadura del relativismo, después de afirmar continuamente la necesidad de la fe para purificar la razón; después de las conferencias magistrales en París, Ratisbona, Londres, ante el Parlamento Alemán y la que no pudo llegar a pronunciar en la Universidad de La Sapienza, desde el primer momento ha querido centrar sus intervenciones en la necesidad de buscar a Dios, de buscar la Verdad, de alcanzar el verdadero sentido de la libertad. Sin Dios, nos ha repetido varias veces, el hombre está descentrado y no sabe dónde ir, y tampoco logra entender quién es. Por eso se explica que sus encíclicas tengan por objetivo a Dios (Deus caritas est), la virtud teologal de la esperanza (Spe salvi) y la necesidad de recuperar el carácter central de la caridad y su relevancia pública (Caritas in veritate -CV-). Sus dos exhortaciones postsinodales nos muestran el camino para encontrar a Dios: la Eucaristía (Sacramentum caritatis) y la Palabra de Dios (Verbum Domini). Y todo ello sin dejar de recordar que, desde la primacía de la gracia, es necesario, sin componendas ni medias tintas, abrirnos a la conversión y a la siempre necesaria purificación interna de la Iglesia. Gracias Santo Padre por todo lo realizado para proteger de los lobos al Pueblo Dios.

Si examinamos la llamada “cuestión social” desde León XIII es curioso el camino recorrido por el Magisterio Social de los Papas. Desde la “cuestión obrera” se ha llegado a afirmar que la cuestión social se ha convertido radicalmente en una cuestión antropológica. Es el mismo hombre y el modo de concebir su vida lo que se ha puesto en crisis y la razón última, enseñada a lo largo de su pontificado, es la censura sobre Dios que se ejerce de continuo en el paradigma cultural hegemónico. Por eso, además de afirmar la consistencia ontológica del alma (CV, 76) quedará siempre en nuestras mentes y corazones su anuncio profético; “El humanismo que excluye a Dios es una humanismo inhumano” (CV, 78). “El desarrollo necesita cristianos levantados hacia Dios en oración, cristianos conscientes de que el amor lleno de verdad, del que procede el auténtico desarrollo, no es el resultado de nuestro esfuerzo, sino un don” (CV, 79).

Gracias Santo Padre. Gracias por devolvernos a Dios y por anunciar por tres veces en España la belleza de la vocación familiar, la luz potente de la belleza divina reflejada en los santos y la propuesta cristiana a nuestros jóvenes. Los tres viajes a España son un motivo de profunda gratitud para todos nosotros. Así lo manifestamos llenando las plazas y las calles por donde esperábamos su bendición. Ahora, después de la sorpresa de su renuncia, llega el momento para la oración por su persona y por el nuevo sucesor de Pedro. Como creyentes estamos convencidos de que el Señor es el dueño de la historia y que es fiel a su promesa: «Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el final de los tiempos» (Mt 28, 21).

+ Juan Antonio Reig Pla
Obispo de Alcalá de Henares